Dorothea & Manuela C

Dorothea
¡Profesora Manuela! Hace mucho que no tenemos una conversación de verdad.

Manuela
Es verdad. Tanto ajetreo no nos deja tiempo para nada, pero me alegro de ver lo mucho que has florecido. Me recuerda a otros tiempos.

Manuela
Estás aún más guapa que entonces; te has convertido en toda una mujer.

Dorothea
Gracias por el cumplido, aunque, viniendo de ti, es como si una rosa halagase a una margarita diciéndole lo hermosa que es.

Manuela
¡Ay, querida! En tal caso, te aconsejo que evites a toda costa convertirte en una rosa como yo. Tenemos muchas espinas.

Dorothea
Vamos, por favor... Deberías estar orgullosa de todo lo que has conseguido.

Manuela
Qué bonito... te agradezco tus palabras, de corazón.

Manuela
No tenías una familia detrás que te apoyase. ¿Cómo lo conseguiste?

Dorothea
Bueno, para poder optar a entrar tuve que tirar de algunos hilos en la nobleza.

Dorothea
En cuanto a los conocimientos necesarios para superar las pruebas... eso fue todo cosa mía, y lo suyo me costó.

Dorothea
Especialmente si tenemos en cuenta que, por aquella época, todavía cantaba ópera. Pero mis ganas de entrar en la Academia podían con todo lo demás.

Manuela
¡Bravísima! Menudo esfuerzo...

Manuela
Siempre te has visto obligada a salir adelante por tus propios medios... Es una pena que no cuentes con el apoyo del prójimo más a menudo.

Manuela
Aun así, todavía no me has dicho por qué tenías tantas ganas de formarte aquí.

Dorothea
¿No es evidente? Pues porque estabas tú.

Dorothea
Me quedé desolada cuando anunciaste que dejabas los escenarios. Pero eso también me hizo reflexionar.

Dorothea
Ver como alguien de tu talla, que estaba en lo más alto, lo abandonaba todo para cambiar de rumbo por completo...

Dorothea
Me hizo pensar sobre cómo quería que fuera mi propio futuro. Así que hice lo de siempre: seguir tus pasos.

Manuela
¡Cielos! No sé qué decir.

Dorothea
Parecía que iba a ser una promoción repleta de jóvenes casaderos procedentes de buena familia... Así que no me lo pensé.

Manuela
¿Y has conseguido lo que buscabas? Ya sabes: cumplir tus sueños, labrarte un futuro, conocer a un buen partido...

Dorothea
Ay, ¿sabes qué? Me encanta volver a hablar contigo después de tanto tiempo.