Byleth & Hanneman A

Hanneman
(...) Lo cual implica que algunos aspectos de tu poder no tienen explicación en el marco de las teorías vigentes.

Hanneman
Esto podría llevar a descubrimientos que supondrían un cambio de paradigma en la emblemología...

Hanneman
Ah... Disculpa, creo que me estoy excediendo con mi monólogo.

Hanneman
Seguimos otro día, ¿de acuerdo?

Hanneman
Dicho lo cual, creo que deberíamos cambiar de tema de vez en cuando.

Hanneman
Hablar de cosas más cotidianas y divertidas, ¿no te parece?

Hanneman
Eh... Vaya, es que no se me da bien hablar del tiempo. A ver, podríamos charlar sobre...

Hanneman
¡Espera, ya lo tengo! Podríamos hablar de lo que nos gusta comer.

Hanneman
Pues eso: qué prefieres, ¿dulce o picante?

Hanneman
Una colega mía propuso la teoría de que la presencia de emblemas en el organismo favorece el gusto por lo dulce.

Hanneman
Según ella, los emblemas influyen en la sensibilidad de las papilas gustativas, lo que a su vez...

Hanneman
Ay, disculpa, que ya vuelvo a divagar. Además, queríamos dejar el tema de los emblemas.

Hanneman
Es deformación profesional, demasiados años en el laboratorio pensando en lo mismo.

Hanneman
Tengo que poner freno a esto.

Hanneman
Eres muy amable, pero no es necesario...

Hanneman
Si algún día se te acaba la paciencia conmigo, mi investigación podría verse perjudicada.

Hanneman
Ya me ha pasado antes, cuando estaba en el Imperio.

Hanneman
Todas las chicas que llegaba a conocer me decían al principio que no les importaba hablar de emblemas.

Hanneman
Pero al cabo de un tiempo se hartaban y dejaban de escucharme.

Hanneman
Al final me enviaban una carta para decirme que sería mejor dejar de vernos.