Ignatz & Hilda C

Hilda
¡Hola, Ignatz! Perdona por haberte hecho esperar. ¿Preparado para la limpieza?

Ignatz
No pasa nada. En realidad ya estaba acabando.

Hilda
¡Vaya, es verdad! ¡Mira qué limpio está todo! Has hecho un trabajo estupendo. Casi me alegro de no haber estado aquí dándote la lata.

Ignatz
Muchas gracias. Ya puedes irte.

Hilda
¿Eh?

Ignatz
Estabas hablando con tu amigo, ¿verdad? Solo hay que recoger unas cuantas cosas. Puedo hacerlo sin tu ayuda.

Hilda
Ah, entonces era a ti a quien vi antes, ¿no, Ignatz?

Hilda
Estaba dispuesta a ayudar. Tan solo tenías que habérmelo pedido.

Ignatz
No pasa nada, estabais charlando.

Ignatz
No quería que pareciera que os estaba escuchando. Además, no me hacía falta ayuda.

Hilda
Oh, Ignatz, ¡qué mono! Eres tan considerado... ¡Muchas gracias!

Ignatz
Encantado de poder ayudar. Ahora voy a recoger todo esto...

Hilda
¡No tan rápido!

Ignatz
¿Q-qué sucede?

Hilda
¿No te estás pasando? ¿No te parece que estás haciendo demasiado?

Ignatz
Eh... No esperaba oír algo así de tus labios.

Hilda
Déjame decirte algo. Es cierto que tiendo a delegar responsabilidades siempre que puedo.

Hilda
Pero, cuando alguien me ayuda, me aseguro de colmarlo de halagos como recompensa por el favor.

Hilda
Así ya quedamos en paz. Por otra parte, mira lo que acaba de pasar.

Hilda
Has hecho todo el trabajo por mí, ¡y casi ni me entero! ¿Qué pasa contigo?

Hilda
¡Pues que has estado a punto de quedarte sin los halagos! Menuda forma de salir perdiendo...

Ignatz
Personalmente prefiero salir perdiendo a importunar a los demás.

Ignatz
Por ejemplo, me habría sentido muy culpable si hubiera interrumpido la importante conversación de antes.

Ignatz
Yo habría ganado muy poco y la inconveniencia que te hubiera causado habría sido enorme. Salir perdiendo es siempre la mejor opción, ¿verdad?

Hilda
Bueno, si eso es lo que piensas... ya no tengo nada más que decir.